miércoles, 22 de mayo de 2013

Me cago en todo, hostia, joder, mierda.

Estoy hasta el coño.

Cada mañana una de las primeras cosas que hago junto con desayunar, es leer la prensa. La leo en internet, es más cómodo: pese a que en mi casa siempre se compró el periódico diariamente nunca me gustaron esas hojas tan grandes y endebles. Y la prensa local es... Bueno, iba a decir rancia pero ahora mismo estoy enfadada por un hecho que acabo de observar (más bien constatar, ya me olía la tostada) en la prensa virtual.

Aquellas personas que me conocen saben de mis trabajos sobre prensa de principios del siglo pasado. Me pasé casi tres años encerrada leyendo revistas y periódicos de entre 1911 y 1923. Mi objetivo era buscar los inicios de las opiniones femeninas en el ámbito público y en presa respetable (ahora mismo me vienen a la mente El País, Mundo Gráfico y mi querida La Esfera. ¡Y encontré más de las que esperaba! De todos los colores: desde las que llamaban la atención sobre la falta de derechos de las personas de género femenino hasta las que se preocupaban de los problemas de la crianza y la educación de los retoños. Para mí era un auténtica alegría encontrarme con una nueva mujer desconocida que había publicado su texto en alguna publicación de prestigio durante el periodo histórico que actualmente llamamos noventayocho.

¡Pues bien! Han pasado cien años y TODO SIGUE IGUAL. Es triste pero si consulto las secciones de opinión de la prensa que leo cerca del 85% de las columnas de opinión pertenecen a hombres de diversas edades. Más o menos un 80% de los blogs también y los de algunas mujeres son de cocina. Increíble. Vamos a excusar los de cocina ya que hoy en día ser chef es un oficio más que reputado y dar trucos y consejos en ese ámbito se lleva a cabo tanto por mujeres como por hombres. Aún así no me digáis que no es triste. Estamos mudas y no es porque no hablemos, es porque nadie nos escucha. Me siento sin voz.

Ejemplos:


Escalofriante ¿verdad?

Existen periódicos y revistas desde un punto de vista femenino, claro que sí, pero en mi opinión no se tienen en cuenta tanto como debería y, lo que es más, pienso que la igualdad en el terreno público no debe darse en ámbitos restringidos sino que debe ser transversal (así que estos periódicos deberían tomar en serio nuestras opiniones SOBRE TODOS LOS TEMAS no sólo sobre el aborto, enseñar las tetas en público y demás cosas sólo accesibles si posees un cuerpo femenino).


lunes, 20 de mayo de 2013

Notas Arqueológicas: Carmen de Burgos.

Me queda el consuelo de saber que a día de hoy mucha gente la conoce: Carmen de Burgos (1867-1932), almeriense de nacimiento y mujer de mundo, más conocida entre los/as suyos/as como Colombine. Yo la conocí de pasada mientras terminaba la carrera allá por los años dorados del feminismo español en la época democrática. Volví a encontrarla, más en profundidad mientras realizaba mi primer trabajo serio de investigación, como corresponsal de guerra para varios periódicos y revistas del panorama español noventayochista. No sabría decir hasta qué punto se la conoce porque yo no paré de hablar de su vida y milagros desde que tuve el gusto de conocerla, cualquiera de mis amigas y amigos lo sabe.

El caso es que yo quería hablaros no sólo de su dimensión como periodista y cronista de viajes sino también de su faceta como escritora de ensayos feministas de los que se han reeditado alguno aunque dependiendo estas ediciones de subvenciones gubernamentales como lo es mi ejemplar de La mujer moderna y sus derechos (1927), un libro fundamental a la hora de entender los movimientos feministas en la Península Ibérica a lo largo del siglo XX.

A menudo me resulta indignante lo poco que se tiene en cuenta en este país la producción ensayística de las mujeres que dedicaron su vida a ello. Me gustaría hablar en alguna entrada también de un ensayo sobre el amor de la vallisoletana Rosa Chacel que su publicado un única vez en la revista de Occidente allá en época republicana. El caso de Colombine me resulta especialmente molesto ya que su ensayo sobre su percepción del entorno femenino y los movimientos en favor de sus derechos alcanza una profundidad y una minuciosidad que muchos contemporáneos suyos hubieran querido en sus ensayos. Cuando lo leí en 2009 me recordó muchísimo al sacrosanto Segundo Sexo fechado más de veinte años más tarde. Por supuesto no profundiza tanto en muchas cuestiones pero sí las pone sobre la mesa y nos invita a reflexionar sobre ellas. El libro se divide en catorce capítulos en los que retrata el movimiento feminista empezando por los que se suponían sus orígenes (con numerosas referencias a la cultura clásica europea), pasando por cuestiones biológicas y fisiológicas y de leyes (es firme partidaria del divorcio y el voto femenino) así como añadiendo un análisis cuanto menos interesante sobre la influencia de la sociedad y la educación en el comportamiento de los seres humanos de uno y otro género. Es consciente de que su obra será infravalorada por ser ella mujer y de la dificultad de difusión de la misma por esto mismo:
"Se exige de la mujer la perfección. Los críticos, hombres generalmente, la tratan, salvo honrosas excepciones, con desdén o con una galantería más perjudicial aún. [...] Se quiere comparar a toda mujer sólo con los hombres de genio, y no se compara nunca a los ineptos y mediocres con mujeres de genio. Por cada escritora sin valor hay un millar de hombres en igual caso" (Burgos, 1927: 113). Esta afirmación es fácilmente comprobable como cierta si se investigan algunas de las entrevistas que concedió durante los años veinte, así el interviewer de La Esfera, Gozález Fiol dice sin ningún reparo (está fechada el 24 de abril de 1922) que "en la visita primera que hice para acordar el fecha para la entrevista, empezó con remilgos de modestia inverosímil, y luego, al celebrarla empezó así: —Bueno, pregunte usted, señor Confesor. Yo no podía contener la risa”, además, al describir su despacho, González Fiol concluye que “su original mesa de trabajo, que tiene no poco de tablero de planchar o de cortador de sastrería”. La conciliación de la vida doméstica y profesional se hacía muy dura para estas mujeres, Colombine, en concreto, era famosa por llevar a cabo su tertulia de los miércoles (popularmente conocida como Los miércoles de Colombine) mientras hacía labores domésticas como pelar patatas o cuidar de su hija.
A mí no me cabe ninguna duda del interés de esta mujer pero estoy convencida de que la intensa vida y obra de esta mujer (más de sesenta novelas, artículos, reportajes, ensayos y traducciones) aún no está en el lugar que merece dentro de los programa educativos de este país que Emilia Pardo Bazán llamaba "el garbanzal", aunque si tenéis interés en leer su biografía, aquí tenéis una referencia bibliográfica:
-Bravo Cela, Blanca; Carmen de Burgos (Colombine). Contra el silencio, Espasa-Calpe, Madrid, 2003. Recuerdo haber consultado alguna biografía más pero no recuerdo la referencia exacta, de todos modos, si a alguien le interesa saber más, puedo revisar las notas de mi trabajo de investigación, ahí tiene que estar todo y más.

martes, 14 de mayo de 2013

Femen en España: Medidas drásticas, medidas no tan drásticas.

El título es peregrino, lo sé. Tampoco es que yo me pase días pensando en las entradas que escribo. Horas sí, pero decir días me parece exagerar. De lo que yo quería hablar hoy es de las divisiones de opuestos en las que vivimos inmersas/os. En concreto de una pero, ¡empecemos por el principio!

Hace cosa de un mes una noticia sacudió las redes sociales: una chica tunecina iba a ser lapidada o no sé qué más por enseñar sus pechos como protesta en una manifestación por los derechos de las mujeres. Amina Tyler, ¿la recordáis? El caso es que la noticia era totalmente falsa: nadie iba a lapidarla, ni la iban a condenar a muerte ni ninguna de las cosas apocalípticas que mucha gente colgó en las redes sociales. Sí, la chica había posado con una mensaje sobre los derechos de las mujeres sobre su torso desnudo pero no, nadie había tomado medidas contra su libertad (o no tan severas). Lo que pasó es que alguien se tomó como legislativas las declaraciones de un señor al que le preguntaron (o se dio por preguntado, no lo sé). No voy a entrar en asuntos religiosos porque este post no trata sobre los problemas de las mujeres en los países musulmanes, si queréis opiniones de mujeres que viven con ello podéis mirar aquí.

El caso es que pese a todo, la mala prensa, el enfado de los colectivos feministas tanto orientales como occidentales, el grupo activista Femen sigue creciendo en Europa. No estoy segura de tener una idea precisa sobre qué se proponen exactamente con su militancia. El caso es que la semana pasada me encontré con esta noticia en un periódico local: ¡click!
Cuando ocurrió el asunto de Amina Tyler, siempre me pregunté si realmente las declaraciones que Inna Shevchenko había hecho a la prensa habrían sido exactamente esas o se habría perdido algo con la traducción (no sólo de idioma sino de palabras de ella a palabras del/la periodista). He tenido la misma sensación cuando leí la noticia sobre las dos chicas asturianas que han motando la célula española de sextremistas. Cuando tenía dieciocho años, ese mismo periódico que linkeo más arriba me entrevistó a mí debido al grupo de música en el que participaba y me atribuyeron cosas que nadie que me conozca pensaría que yo habría dicho (entre otras cosas decían que era licenciada en Filología Inglesa cuando ni siquiera iba a la universidad). Así que digamos que no me creo todo lo que dice y mucho menos cuando las entrevistadas son chicas jóvenes.

Al grano:
No creo que la iniciativa esté mal, de hecho, creo que puede ser atractiva para muchas chicas jóvenes. Cuando yo tenía veintiún años mis amigas me decían que estaba un poco loca por leer libros feministas y poner el grito en el cielo por todas esas cosas por las que lo sigo poniendo, que "eso ya estaba superado". Por fortuna, a día de hoy las he oído a todas en mayor o menor medida decir que ellas son/se consideran feministas (ahora es cuando yo digo "os lo dije" -risas-). Hoy las cosas han cambiado y han de tomarse medidas más drásticas. La visibilidad es importante y estas muchachas, estas mujeres, estas chicas es cierto que tienen el don de ser "atractivas" para los medios, show must go on. Piensan que deben responder con agresividad a lo agresivo del sistema actual para aquellas que tenemos cuerpos femeninos. No voy a decir que no tengan razón, la tienen y mucha.



Pero:

¿Es realmente necesario usar esta plataforma? ¿No existen ya en este país agrupaciones que reinvindican ese "cuerpo político" que clama mi paisana? Entiendo cómo se sienten. El feminismo de la Academia es árido, es poco atractivo, está... desconectado de la gente. Yo he formado parte de él y aún me duele. Me duele haber estado ciega, haber aspirado al aura de prestigio sin dolor. La realidad es agresiva con las mujeres. La estructura de las universidades no es amistosa con los movimientos feministas. Y no se propone un un arreglo a nada: A NADA. Una no es feminista si no le duele, si es así simplemente mira y cuenta o ni eso. En cierto modo esta chicas combaten el fuego con fuego, o al menos, esa parace ser su intención.

La verdad es que no tengo muy claro qué quiere decir esta mujer con declaraciones como "[...]tiene que ver con eso tan antiguo de que el cuerpo de la mujer es política, porque siempre lo ha gobernado el patriarcado. Es necesario que las mujeres usemos nuestro cuerpo como herramienta de protesta: es una forma más de reivindicar la potestad sobre él". No sé si está reivindicando si lo personal es político o si está exponiendo que el cuerpo femenino, así en modo platónico, forma parte de una construcción social per se en lo que viene siendo nuestro día a día. Pero supongo que es un principio, un germen teórico/ideológico. Es algo más que formar parte de "una organización de mujeres activistas en top less que defienden su igualdad sexual y social en el mundo" (como se define el grupo en su web oficial). Y no debemos olvidar que estar declaraciones no son suyas, sino que vienen en un periódico como suyas (lo cual pueden ser cosas muy distintas).

Desde un punto de vista optimista me gustaría decirles que no tienen razón pero si leéis los comentarios que pone la gente a la noticia... Se explica solo: la mayoría de la gente sólo ha visto una chica semidesnuda que además encaja a la perfección con el cánon de belleza occidental (vale que no es culpa suya, cada una es como es). He reconocer que a mí me resquemó lo bien depilada que está. En este aspecto, Femen recibe críticas de otros colectivos feministas que objetan que dejan fuera a las sexualidades no normativas y otros cuerpos fuera del cánon. Ciertamente estaría bien ver un grupo de personas diverso. El hecho de no serlo tiene la vertiente negativa de que tratan de vendérnoslas como personas que sólo quieren llamar al atención usando como medio su atractivo sexual (al gusto del patriarcado, por supuesto). Para mí el problema es que pese a las buenas intenciones que no dudo que tienen mis paisanas esto es un gran riesgo que asumen.

Sin embargo no debemos olvidar que estas activistas se someten a peligros de verdad en su periplo en pos de los derechos y libertades de las mujeres (¡de todas las mujeres!), en algunos países se han llevado a cabo medidas reprensoras como multas y cárcel contra ellas.

Dice en la entrevista la joven entrevistada que "los objetivos son comunes a todas las Femen. Parten de luchar contra el patriarcado: los tres grandes enemigos son las iglesias y sus instituciones, la explotación sexual y las dictaduras y leyes que supongan una violencia para las mujeres. Todo deriva de ahí, de la moral, el mercado y la violencia. En España, nos preocupa especial y profundamente lo que está pasando con el aborto". Sí. Bueno, es parte de verdad pero no sólo. Creo que éste sí es uno de los problemas graves que tiene el grupo: la tendencia a generalizar, que por un lado lo hace todo claro y diáfano pero deja muchos frentes abiertos sobre los que objetar. ¿Qué entra dentro de explotación sexual o qué son leyes violentas para las mujeres? Me imagino que la nueva Ley del Aborto puede ser una. Esta vaguedad objetiva es la que ha dado lugar a malestar con otros grupos que vieron sus declaraciones como imposiciones, como una manera de silenciar las voces de otras/os.



Os dejo una cita de un artículo que podéis leer entero aquí para terminar y que resume muy bien mis pensamientos sobre este grupo: "Es curioso como ese cuerpo se censura o no dependiendo del significado que le demos a su visibilidad y no respecto a su visibilidad misma. Si es para vender un perfume, si es como apoyatura de un relato patriarcal,  puede mostrarse. Si es no comercial y pretende usarse para protestar contra ese relato patriarcal, entonces de repente el mismo cuerpo se vuelve escandaloso y aparecerán policías para taparlo con una manta. Así que cuerpos para vender sí, cuerpos para ser usados sí, cuerpos para someterse también, pero cuerpos en rebeldía no. Las Femen han tenido la desgracia de que no siendo “post…nada” ni postfeministas, ni postporno, ni postmodernas, han decidido mostrar sus tetas casi como si lo fueran.  Y eso ha desconcertado a casi todas".


Mucha suerte con la iniciativa, paisanas. Os veré el jueves 16, supongo :)

miércoles, 8 de mayo de 2013

Notas Arqueológicas: Concha Alós.

¡Esto es algo que llevo tiempo con ganas de hacer! Más que las partes de "mayday" y crítica general. A veces parece que las feministas siempre estamos enfadadas y quejándonos (con razón casi siempre desde mi humilde punto de vista) pero no es verdad y además de todas las luchas internas y externas a las que nos enfrentamos día a día también tenemos hobbies. El mío (uno de ellos) es la arqueología literaria. Tal vez algún día hable sobre mis experiencias en depósitos de bibliotecas terminando con los dedos negros del polvo de los años. Pero hoy no. Hoy quiero inaugurar una pequeña sección sobre escritoras españolas que han sido olvidadas por la cultura.

La información de la que dispongo sobre Concha Alós es difusa. Digo difusa porque muchos datos coinciden pero no todos. No me ha sido posible confirmar algunos y no me atrevo a afirmar ninguna de las informaciones como verídica así que por favor, tomadme como simple contadora de historias. Una de las pocas en las que las fuentes parecen ponerse de acuerdo es el período de su vida: de 1926 a 2011. Hay una nota de prensa en El País avisando de su fallecimiento.



Muchas veces, cuando leo textos críticos de colegas de profesión (al fin y al cabo me licencié en Filología Hispánica hace ya unos cuantos años) pienso que muchos/as se debaten entre el amor a la profesión y la desazón de saber que nadie tiene ninguna fe ni en su labor ni en que puedan descubrir nada nuevo. Es llamativo que casi nadie recuerde que esta mujer, Concha Alós, ganó dos veces el Premio Planeta: la primera en 1962, con El Sol y las Bestias (al que tuvo que renunciar por motivos legales de contratación con otra editorial, o un problema similar: no hallo fuentes) que se publicó finalmente con el título Los enanos y una segunda dos años más tarde, en el 64 con Las Hogueras. También logró quedar finalista en el Premio Sésamo con su relato "El agosto", que no es tan conocido pero del que muchas mujeres obtuvieron menciones (por ejemplo y querida y no olvidada Dolores Medio, entre otras).



Hay pocos datos de su vida, hija de republicanos en Valencia, logró estudiar magisterio. Una trayectoria que muchas mujeres en la España del franquismo seguían ya que era de las pocas profesiones que estaba bien vista entre el género femenino. Supongo que muchas también tendrían vocación, pero no voy a meterme en factores educacionales de las mujeres en al postguerra española. El caso es que ella acabó malcasada con un periodista del régimen y viviendo en Mallorca. Digo malcasada porque, por lo que parece, su separación y marcha de Mallorca fue sonada. Se marchó con otro hombre, escritor también y mucho más joven que ella, e inició una nueva vida en Barcelona donde compaginó su labor literaria con el asesoramiento de su pareja como mánager.

Lo más llamativo es que trató temas poco tratados o poco tratados desde una perspectiva femenina -al menos en el imaginario común-: el aborto, la homosexualidad, la prostutición... Temas que sí, aparecen constantemente (la homosexualidad menos) en la narrativa de la época pero apenas tuvo repercusión posterior aunque muchas de las publicaciones tuvieron tiradas largas. He leído en el blog de un señor que dice que es profesor (que seguro que lo es pero yo nunca había oído hablar de él), que se achaca este olvido a que siempre tuvo fama de escritora comercial. Sin embargo me niego a creer a pies juntillas sin justificación previa a este paladín del progreso todo lo que dice ahí ya que pese a que alega defenderla y reivindicarla cae miles de tópicos y comparaciones que no vienen a cuento. Hace unos años, una amiga se escandalizó al oír a un compañero del curso de doctorado hablar sobre "la literatura femenina y su tendencia a lo comercial", por lo visto aún sigue ahí el prejuicio. Existe también un artículo de Lucía Montejo, titulado muy originalmente "La narrativa realista de Concha Alós" que no voy a linkear porque no creo que sea legal pero que podéis leer en dialnet.

Algunas de sus obras más famosas son: Cuando la luna cambia de color (1958), Los enanos (o El Sol y las Bestias) (1962), Los cien pájaros (1963), Las hogueras (1964), El caballo rojo (1966), La madama (1969), Rey de Gatos. Narraciones antropófagas (1972), Os habla Electra (1975), Argeo ha muerto, supongo (1982), El asesino de los sueños (1986). 

martes, 7 de mayo de 2013

Aromas extraños.

Este post iba a llamarse originalmente "Mayday: Ausencias en la cultura (II)". Lleva a medias cosa de quince días y lo había dejado porque tenía otras ideas en mente. Sin embargo ayer sucedió lo impensable. Y antes de que me diera tiempo a continuar con mi serie de cartas a personas/entidades a las que iba a aludir. Empezaré por el principio:


Hace un par de meses, harta de ver que las guionistas y dibujantes de El Jueves, revista que compro desde que tengo diecisiete años y que leo desde que mi padre me dejó hace ni se sabe cuántos, desaparecian sin dejar rastro de un número a otro; decidí escribirles para saber el motivo. El caso es que su directora (porque sí, es una mujer) no sólo publicó mi carta en la sección a la que iba dirigida sino que me respondió personalmente. No voy a entrar en si estoy de acuerdo o no con los argumentos que me dio sobre este extraño asunto, sólo diré que fue muy educada y expuso su punto de vista -razonable, por otro lado- que argumentaba que las muchachas y las mujeres que habían colaborado y colaboraban eran itinerantes porque estaban inmersas en otros proyectos personales ajenos a la revista. También decía que le era muy difícil encontrar mujeres que se dedicasen a ese tipo de humor que iba con el "talante" de la revista, que buscaba pero no había. Pese a todo y a que su humor la mayoría de veces me resulta casposillo -hay tiras que nunca leo-, a veces sorprenden con páginas como la dedicada a la libertad para abortar de la semana pasada, escriba y dibujada por una mujer.

Hay un resquicio de esperanza. Eso no lo dudo.

Mi siguiente paso era escribir a la revista Mongolia (que no voy a linkear porque bastante publicidad gratis le están haciendo ya). Pero visto que ayer nos mandaron a fregar a todas las feministas (en femenino) y el debate que suscitó tanto en mi ámbito público como privado simplemente, no... No tengo palabras decentes para ellos. Lo siguiente será chotearse de los/as deshauciados/as a ver si también les comen el rabo. Que sí. Que usan eso en todas sus cartas. No deja de ser una repuesta falocéntrica, infantil y falta de gracia. Me voy a limitar a hacer corta/pega de la carta que ya escribí ayer:



"Queridas directores/guionistas de la Revista Mongolia:


Ya vi cuanto apestábais a Brummel y Barón Dandy cuando estuvísteis en Oviedo, por suerte para vosotras, este señora no tuvo tiempo de ir a haceros unas cuantos preguntas que le hubiera gustado hacer. Por suerte, mis queridos amigas, ya habéis respondido a todos y cada uno de mis dudas con este simple y sencillo respuesta. Estábais las siguientes en mi lista de cartas a directoras de revistas de humor y creo que ya no hace falta.

En mi humilde opinión de lector de revistas políticos y humorísticos desde que tengo uso de razón (pues mi padre también gastaba), siento deciros que poneros gilipollas ha sido del peor gusto puesto que el carta de la lector no era ofensivo (la mía iba a ser gamberro pero ahora os quedáis sin), en un alarde de petulancia os citaré a las romanos, las cuales decían que "excusatio non petita, accusatio manifesta". Por la que a mí respecta no habéis hecho otro cosa que poneros en evidencia ya que mira que era fácil responder con un poca de gracia y no como los garrulos con ínfulas que sois.

Besitos."

El caso es que personalmente, no estoy a favor de las respuestas violentas y deslenguadas porque se cazan más moscas con miel que con vinagre; sin embargo estoy satisfecha con la actitud de algunas de darles de su propia medicina y empezar con faltas de respeto y descalificaciones varias (ya que mandarnos a fregar y demás lindeza ya lo fue por suparte). Es liberador. Muy liberador. Gracias a aquellas que lo hicisteis.

-No sé por qué, no me deja subir la imagen que había dibujado especialmente para ellos-


Ahora mismo no tengo ni ganas de seguir escribiendo. Me está dando asco la hipocresía de las disculpas que acaban de publicar. Sí, en el fondo sois "buenchas". Seguro que sí. Yo también os quiero.

Mi plan original era escribir también a otra publicación que por su formato e inmediatez suele incurrir tanto en lo mejor como en lo peor de la prensa humorística: El Mundo Today, donde he visto tanto joyas del casposismo barondandiniano como verdaderos monólogos de humor gamberrete (ahora mismo me acuerdo de una noticia sobre Pérez Reverte que me hizo llorar de la risa, algo sobre un premio que se concedía a sí mismo). Su redacción se compone exclusivamente de hombres a excepción del programa de radio, cuya producción está a manos de una mujer (al menos eso dice su web). Sin embargo admito que mi cabreo con ellos suele darse más debido a los comentarios que dejan los/las lectores/as, aunque recuerdo vívidamente un artículo sobre culos femeninos que me dió bastante asco. No lo encuentro, si alguien es tan amable de pasarme el link lo añadiré.

Es, supongo, inevitable que en la sociedad patriarcal en la que vivimos se cuelen de vez en cuando estas cosas pero rectificar, amigas redactoras de Mongolia, es de sabias. Y no, no me creo vuestras disculpas tan de pega como vuestro sentido del humor.

Y dejad del Barón Dandy, que se os huele a leguas.

lunes, 6 de mayo de 2013

Mater dolorosa

Ayer me había propuesto escribir algo sobre maternidades, por la cosa esta que me ha dado de escribir sobre días "de celebración" como hice el 8 de marzo o el Día del Libro. Pues bien no ha sido posible pero eso no impide que lo escriba hoy.

Todo este rollo viene a cuento de diversos esbozos de ideas que surgen en mi mente cuando oigo la palabra "maternidad". Es una especie de tabú aún en día incluso entre las feministas. Las madres siguen siendo una idea quasi sacra e intocable aún cuando todas/os conocemos mujeres que no son o han sido buenas madres o que no lo serán. Pero la cuestión para mí es ¿qué es ser "buena madre" y por qué se ha de serlo? Esto me lleva a acordarme del bueno de Gallardón y corte secreta de antiabortistas y del capítulo sobre las madres que escribió Simone de Beauvoir en El Segundo Sexo. También me recuerda una serie de artículos que leí la semana pasada sobre crianza y maternidad de la saqué la conclusión siguiente: cuida a tus retoños como creas más conveniente siempre y cuando esto esté dentro de tu idea de cómo ser una buena persona (y prepare a los retoños en sí para serlo también).

Me resulta fascinante que aquí en España estén pensando en reformar la Ley del Aborto, es ridículo. Las leyes no debe castigar inocentes, creo yo, que es lo que están buscando culpabilizando a aquellas mujeres que deseen interrumpir su embarazo. Quitando qué pueda pensar cada cual sobre lo legítimo o no de hacerlo lo cierto es que dicha ley no obliga a nadie a hacerlo si no lo desea. Lo único que se va a conseguir de este modo es aumentar el riesgo entre las personas que sí lo quieran. Me resultó muy triste ayer, al releer el capítulo del Segundo Sexo, recodar que el concepto sigue siendo el mismo a día de hoy y que muchas muchachas con poca solvencia económica se verán obligadas a incurrir en prácitcas que pondrán en peligro su vida. Porque obviamente, la Ley es distinta en casi todo el resto de países europeos y quien pueda permitirse el viaje lo tendrá bien sencillo. No voy a entrar en el hecho de resulta evidente que una mejor educación sexual y una mayor normalización del uso de anticonceptivos podrían arreglar muchos de estos embarazos no deseados pero creo que son dos frentes abiertos sobre los que incidir no uno u otro sino ambos al mismo tiempo. El aborto no es un anticonceptivo, ¡claro que no! Pero debería ser una vía a la que recurrir en caso de estar embarazada y no desearlo.

Otra cosa que me resulta interesante en la negación de la importancia de la madre una vez ha parido. Entonces la criatura pasa a primer plano y ella, la madre, aún convaleciente tiene que sacrificar parte de su vida para que "tenga lo mejor". Adiós al tiempo para una misma, al menos hasta que camine. Y no sólo eso sino que el hecho de desearlo hace que seas mirada como una "mala madre". Cuando comento estos miedos con mi pareja siempre me dice que no importa que quiera tiempo para mí porque él también querrá tiempo para hacer de padre, pero aún así. El artículo sobre la lactancia de B. Gimeno, por ejemplo, levantó ampollas y una acalorada discusión, así mismo, en la misma revista hace poquito otras dos mujeres comentaron pros y contra sobre el mismo tema con idéntico resultado (pego aquí un enlace a los dos artículos). Me parece vergonzoso que haya personal sanitario que se permita el lujo de juzgar si una mujer debe o no dar de mamar a su criatura, mi madre no me dio de mamar (por razones médicas) y salí bien, conozco a muchas mujeres que han tenido que dejar de dar el pecho porque les resultaba doloroso. No sé por qué tiene nadie que decidir si torturarnos o no es de ser mejor o peor persona. Al fin y al cabo a la/al recién nacida/o le da igual si lo que la/le alimenta es la teta de su madre, la de su tía o la de una loba. Nadie se preocupa del bienestar de madre tras el parto.

Recuerdo que hace años no me gustaban los renacuajos. Tras diversos avatares de la vida, llegué a ser profesora en un colegio de primaria durante una temporada y me di cuenta de qué, carámbanos, sí me gustaban. Nunca me había sentido tan cómoda dando clase a estudiantes más creciditos/as. Aún así, aún me da miedo ser madre, son demasiadas cosas: la responsabilidad, el tiempo libre (colabore o no tu pareja sigue siendo tiempo), la situación actual, la mala calidad de la educación y la sanidad... No sé. No son buenos tiempo para las madres.

Feliz día igualmente, mamás.